AMPA Gómez Moreno alerta de la gravedad de perder la gestión del comedor escolar


La AMPA “Amigos de una escuela mejor” del CEIP Gómez Moreno quiere alertar de la gravedad de perder la gestión del comedor escolar por la intransigencia de la Junta de Andalucía
La AMPA cree que estamos ante una situación política de libro, en la que la actuación de la Administración empeora claramente la vida de sus administrados. Estamos convencidos de que es posible revertir esta situación para que el comedor ecológico no desaparezca.
Hemos conseguido lo que parece imposible: unanimidad de todos los partidos políticos a nivel local y en el parlamento, por la defensa de nuestro modelo de comedor ecológico autogestionado: sano, cercano y sostenible.
Todos los partidos políticos a nivel local se pusieron de acuerdo con una Declaración Institucional de apoyo durante el pleno del Ayuntamiento de Granada del día 27 de abril de 2018. Igualmente el día antes, el 26 de abril, la Diputación de Granada aprobó una moción para proteger nuestro comedor. Por otro lado, también desde el poder legislativo, hubo un acuerdo para apoyar este tipo de gestión de comedores, con dos PNL (propuesta no de ley), una en 2014 y otra en 2016.
Andalucía es la única Comunidad Autónoma que se queda sin AMPA que gestionen comedores.
La AMPA denuncia que la Junta no solo ignora al Ayuntamiento, a la Diputación, y al Parlamento, sino que también hace oídos sordos a la ciudadanía. No asume su error por un concurso de licitación mal diseñado, con el que en esta última convocatoria, han borrado del mapa los últimos comedores gestionados por AMPA en Andalucía, las de los centros de Almería: Santa Isabel, Europa, Francisco de Goya y la Chanca y nosotros en Granada.
Hasta 2014 las AMPA podían gestionar los comedores gracias a un convenio con la Junta de Andalucía, pero a partir de ese año se nos obliga a concursar en licitación pública. El problema es que, tal y como están redactados los pliegos, se favorece a las grandes empresas que tienen capacidad para hacer las mayores rebajas económicas. Otros criterios de salud, de carácter social o medioambiental, donde las AMPA sí podemos competir no se contemplan. Esto ha llevado a la situación tan disparatada en la que nos encontramos ahora: un AMPA con una gestión modélica y multipremiada, con unos resultados inmejorables, pierde la gestión del comedor para entregársela, con toda probabilidad, a una empresa de catering que acumula reclamaciones.
Paradójicamente por otro lado, la Junta está sacando adelante la llamada Ley de obesidad, que se ha basa en la estrategia NAOS, del cual recibimos el premio accésit el pasado mes de abril por el fomento de la alimentación en el ámbito escolar. Poca credibilidad se le pueda dar a una ley y a sus promotores, cuando los políticos en su gestión hacen lo contrario de lo que pregonan.
Andalucía da un paso atrás en la alimentación saludable en los colegios
En otras Comunidades Autónomas se están recuperando las cocinas de los colegios y se promueve el consumo de cercanía, y en el caso de los concursos, en muchos lugares se sacan con un precio cerrado, y se hace una valoración por otros criterios que no sean los económicos. También se penaliza a empresas con un historial demostrado de quejas y mala gestión.
No es el caso de Andalucía, en esta Comunidad Autónoma se está acabando con las cocinas de gestión directa, tal como denuncian las familias de Marbella, se puntúa básicamente el precio hasta llegarse a dar el caso, por ejemplo, un alarmante precio de 2,50 euros el menú, y se cocinan los concursos a gusto de los lobbies de catering.
La ley y los funcionarios públicos deben estar al servicio de los ciudadanos, y no al revés.
Todo lo que se podría perder, tras 15 años de gestión
1. Alimentación con productos de calidad, ecológicos en un 80-90%, frescos y de cercanía cocinados in situ a diario (la nueva adjudicataria tendrá solo la obligatoriedad de dar 5 kg por niño y mes).
2. Se fomenta el consumo de cercanía y el comercio local, apoyando a los pequeños productores de la región, en nuestro caso de la Vega de Granada.
3. Integración en el proceso educativo como un aula más, con la participación de las familias y corresponsabilidad.
4. Los trabajadores tienen buenas condiciones de trabajo que les permiten estar comprometidos y volcados con el proyecto. Además, tenemos un plan de formación en hábitos saludables.
Nuestro comedor lleva 15 años funcionando en condiciones de excelencia y ha sido capaz de recuperar el alumnado de una escuela que estaba a punto de cerrarse, pasando en estos años de 70 a 270 escolares matriculados. Gracias a nuestra buena práctica, la tasa de obesidad y sobrepeso en nuestro colegio está es del 8,8% (según datos tomados por el centro de salud) muy por debajo de la media de Andalucía.
La alimentación de nuestros niños y niñas en la escuela pública está en manos de la Junta de Andalucía, y nosotros creemos que no se está haciendo bien, y esto es lo que nos ha forzado, como padres y madres responsables, a hacernos cargo, pero idealmente esto no debería ser así. La Junta debería ser capaz de garantizar un servicio de calidad. La consecuencia más inmediata de esto es que los padres que se lo pueden permitir crean comedores privados en los que sí se da un servicio de calidad. En Granada ya existen cinco comedores de este tipo. De modo que al final son las familias con menos recursos y que no pueden prescindir de la subvención de la Junta las que permanecen en el comedor escolar a disgusto pues no tienen otra opción.
Esto nos parece una de las formas de discriminación más aberrantes y vergonzosas que se pueden dar en pleno siglo XXI. Dicho con toda la crudeza: los ricos comen bien y los pobres comen catering. Esto no hace más que agravar la estrecha relación ya existente entre condiciones socioeconómicas y obesidad.
Queremos señalar que más de 50 organizaciones apoyan nuestro modelo y nos han acompañado en esta lucha. Entre ellas CODAPA (confederación integrada por siete federaciones provinciales andaluzas que agrupan a cerca de 2.700 asociaciones de madres y padres), FAMPA (Federación Provincial de Asociaciones de Padres de Alumnos formada por 325 AMPA), comerciantes y organizaciones del Albaicín y de la Vega de Granada, asociaciones nacionales de justicia alimentaria, y en defensa de la Vega como la Asociación Somos Vega, Somos tierra, que recientemente nos había concedido el premio “Amigos de la Vega” o las cinco asociaciones gastronómicas de Granada creadas precisamente por su descontento con las empresas de comida preparada de sus respectivos centros: Asociación Donde comen los cocos, Asociación Donde comen los monstruos, La cuchara de la Abuela, Como de Graná y A fuego Lento.
Estamos seguros de que tenemos la razón, porque un proyecto así no se puede perder, tenemos los apoyos y nos sentimos fuertes para seguir peleando, si la situación no se revierte seguiremos con las movilizaciones.
¡No me toques la olla!

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