Membrillo, desinfecta nuestro organismo

Membrillos en el árbol. Su piel es amarilla.

El membrillo es el fruto del membrillero, árbol de la familia de las Rosáceas. Pertenecen a esta familia, además de los rosales, las principales frutas que comemos: manzanas, peras, melocotones, ciruelas. Su piel es aterciopelada y su pulpa, amarillenta y áspera. Esta pulpa es muy aromática, con un delicado aroma a miel, aunque su sabor es ácido y áspero. Contiene semillas mucilaginosas en su interior.

El membrillo es el fruto del membrillero, árbol de la familia de las Rosáceas. Pertenecen a esta familia, además de los rosales, las principales frutas que comemos: manzanas, peras, melocotones, ciruelas. Su piel es aterciopelada y su pulpa, amarillenta y áspera. Esta pulpa es muy aromática, con un delicado aroma a miel, aunque su sabor es ácido y áspero. Contiene semillas mucilaginosas en su interior.

Propiedades del membrillo

Esta fruta es altamente beneficiosa para nuestra salud porque ayuda a luchar contra el cansancio físico y mental. Muy recomendable en dietas de personas con anemia porque estimula el apetito. El ácido málico, presente en el pigmento vegetal que da sabor a la fruta, ayuda a eliminar el exceso de ácido úrico -que provoca ataque de gota- y a eliminar piedras de hígado y riñón, convirtiendo al membrillo en un excelente desinfectante y desintoxicante. Rica en pectina, fibra soluble que ayuda a reducir los niveles elevados de colesterol en la sangre y rica en tanino, que le confiere propiedades antiinflamatorias y astringentes. Es muy recomendable su consumo en caso de diarrea o problemas intestinales.

Además, el membrillo se conoce por su alto contenido en potasio, necesario para la trasmisión y generación del impulso nervioso y para el correcto funcionamiento de nuestros músculos y para reducir la hipertensión arterial. Por lo tanto, el membrillo combate los problemas gástricos, fortifica nuestro aparato digestivo y estimula el hígado.

Las vitaminas y minerales se aprovechan mejor al consumir esta fruta cruda. Aunque no acostumbramos a tomarla así, recomendamos probarla cruda con una pizca de sal.

Más común es utilizar el membrillo para elaborar dulce de membrillo. Nuestra receta es cocerlo a fuego lento partido en trozos –sin quitar semillas ni piel-, con poco agua en el fondo y bien tapado para aprovechar su jugo. Cuando esté cocido, quitar semillas y triturar. Entonces añadir el endulzante (mejor sirope de ágave o stevia que azúcar), poniendo la mitad del peso de la fruta cocida. Con esta proporción se convierte en una crema ya que no solidifica completamente, pero es más saludable y está delicioso untado sobre una tostada o combinando con yogur. ¿Queréis enviarnos la vuestra?

En La Garbancita podéis disfrutar de membrillos en su temporada de productorxs ecológicxs FruitalpuntBio.

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